En fotografía , el término “retoque fotográfico” se refiere a cualquier retoque que se haga sobre una fotografía para cambiar la realidad de la misma. Puede incluir la eliminación de personas u objetos, la eliminación de acné o cicatrices, la alteración de las formas corporales o cualquier otra forma de manipulación de la fotografía original.
Antes de la fotografía digital y de la introducción de Adobe Photoshop y otros programas similares, la aerografía se hacía a mano. Los artistas tenían que limpiar las fotografías manualmente. Usaban aerógrafos, pinceles, tintes y otros materiales para corregir las imperfecciones. Era una habilidad que requería mucho talento.
Hoy en día, la aerografía se realiza principalmente con ordenador y suele agruparse en la categoría de “retoque”. Sin embargo, todavía se oye utilizar el término, sobre todo cuando se habla de modelos que parecen tener cuerpos perfectos en los anuncios.
Índice
Historia
Antes de que la fotografía digital trajera consigo la edición digital, los negativos y las impresiones se modificaban directamente mediante diversas técnicas. La aerografía era probablemente la más popular de estas técnicas.
En los primeros tiempos de la fotografía, era necesario realizar retoques debido a las limitaciones de las placas y las cámaras que utilizaban los fotógrafos. Especialmente con el daguerrotipo, que apareció justo antes de 1840, era necesario realizar retoques para crear imágenes de alta calidad.
En la década de 1890, se desarrollaron los aerógrafos y el retoque fotográfico cambió para siempre. Los equipos fotográficos mejoraban continuamente y las nuevas capacidades para realizar ediciones suaves con aerógrafos generaron una demanda increíblemente alta de fotografías con lunares, cicatrices y otras imperfecciones eliminadas.
Hay que tener en cuenta que la fotografía en color no estuvo disponible hasta la década de 1930, aunque la gente quería sus retratos en color, como si fueran pinturas. Los artistas teñían las fotos en blanco y negro con aerógrafos para imitar el aspecto de un retrato a todo color. La demanda era tan alta que se construyeron fábricas para satisfacer la demanda de fotos retocadas con aerógrafo.
La mejora continua y la disponibilidad de cámaras, como la Kodak Brownie, redujeron la necesidad de retocar profesionalmente las fotografías en los Estados Unidos. A mediados y finales de la década de 1930, el régimen de Stalin en Rusia adoptó la técnica del retoque fotográfico como una forma de eliminar a personas “desaparecidas” o en desgracia de las fotografías oficiales.
Los fotógrafos profesionales siguieron utilizando el retoque manual para retratos y trabajos comerciales. Muchos artistas del aerógrafo y retocadores profesionales siguieron trabajando con películas e impresiones en papel hasta que apareció la fotografía digital. En ese momento, muchos llevaron su oficio al ordenador y siguieron ofreciendo servicios de retoque utilizando las nuevas herramientas.
Técnicas modernas
Aunque los aerógrafos han dado paso a la edición digital, el estilo y la técnica del retoque con aerógrafo siguen prosperando. Los programas de software como Photoshop y muchos otros permiten a los usuarios editar fotografías con mucha más precisión que incluso los artistas de aerógrafo más expertos de la época de la fotografía con película. Con mucha frecuencia, el término “aerógrafo” ha sido reemplazado por “retocado con Photoshop”.
Este avance tecnológico también ha dado lugar a muchos debates. La capacidad de manipular una fotografía de forma tan precisa y con herramientas tan fáciles de usar plantea cuestiones éticas. ¿El exceso de retoques en las modelos ha dado lugar a percepciones poco realistas sobre la imagen corporal ideal? ¿Pueden los fotoperiodistas eliminar un elemento de una fotografía para alterar la realidad de lo que ocurrió? ¿Las empresas lo utilizan para crear publicidad engañosa?
La cuestión de cuánto es demasiado retocar con Photoshop es un tema de gran debate en la fotografía actual. Ha llevado a muchas personas a ser muy escépticas ante casi cualquier fotografía que ven. Sus preocupaciones no son infundadas, ya que los casos de manipulación fotográfica sin escrúpulos han sido objeto de muchos titulares.