Tejer con dos hebras de hilo

Hay muchas razones por las que podrías optar por tejer con dos hebras de lana a la vez. Es una manera fácil de añadir grosor a un proyecto, lo que lo hará más duradero y cálido, como mi diadema de punto arroz, que usa dos colores de la misma lana tejidos a la vez.

Agregar color es otra razón por la que podrías querer trabajar con dos o más hilos, lo que automáticamente hace que un proyecto luzca más interesante que si se trabajara con un color sólido.

A veces, se mantienen los mismos dos colores en todo momento, o puedes cambiar uno o más de los colores a medida que avanzas para crear un aspecto ombré o simplemente una combinación más dinámica como en este  poncho para bebé .

Puedes combinar más de dos hilos para crear un proyecto que te permitirá deshacerte de todo lo que tienes guardado, como mi bufanda de color favorito, que utiliza hebras de cuatro colores diferentes unidas y tejidas con agujas de tejer gigantes de tamaño 50 de EE. UU.

Sin embargo, puede ser un poco complicado trabajar con dos o más hebras de hilo a la vez, principalmente por la dificultad de torcerlas. Las hebras se retuercen automáticamente al tejer con ellas; al hacerlo, las hebras con las que se trabaja se retuercen muchísimo, lo cual puede ser muy frustrante.

La buena noticia es que esto no hace mucha diferencia en el tejido terminado, por lo que no tienes que preocuparte por tratar de enderezar los hilos cada vez que haces una puntada, lo que te volvería loco de todos modos.

Puedes intentar evitar este problema (o al menos limitarlo) enrollando los dos hilos juntos en un solo ovillo o incluso comprando un hilo compuesto por varias hebras enrolladas juntas. Otra opción es meter cada ovillo en una bolsa con cierre hermético o en un recipiente de plástico con un agujero en la tapa. Introduce el hilo por el agujero de la tapa o de la bolsa. Esto limita el contacto de las hebras con la aguja, reduciendo así la torsión.

Si se te enreda mucho al tejer con dos hebras juntas, detente al final de cada vuelta o cada dos vueltas y desenrolla. Esto facilitará mucho el trabajo con la lana a medida que avanzas.

En lo que respecta al tejido propiamente dicho, trabajar con dos o más hebras a la vez es exactamente lo mismo que tejer con una sola hebra, aunque al principio puede resultar un poco incómodo.

Lo principal es recordar que cada punto consta de dos lazadas, por lo que cada dos lazadas en la aguja de tejer son en realidad un punto. Si empiezas a tejer cada lazada como un solo punto, rápidamente tendrás un proyecto mucho más grande de lo que esperabas (aunque he visto que esto se usa como método intencional para aumentar los puntos rápidamente, ese no suele ser el objetivo).

Asimismo, al tejer cada punto, debes usar ambas hebras de lana para tejer cada punto. Si sueltas una y la recoges después, terminarás con una hebra de lana sin tejer en todo el proyecto. Puedes solucionar este problema de la misma manera que recogerías un punto suelto .